Lena y Carmen están ingresadas en un centro de salud mental. A pesar de su diferencia de edad, estas dos mujeres desarrollarán una relación muy especial y, en cierta media, especular. Así, a través de la empatía, el cariño y la falta de juicios, ambas lograrán superar sus propias culpas y miedos y plantar la primera semilla de su recuperación.